Recuperando la memoria

Sentarse al fuego de las palabras, sentirlas vivas, chispeantes, capaces de actualizar ecos eternos y tiempos inexistentes.

Aquí tienes un lugar, que la rueda permite ampliarse y abrirse para que sientas tu espacio.

Que encuentres cobijo, mirada, escucha. Pero, sobre todo, que te encuentres...

junio 27, 2011

Destino

Hallarte,
extranjero en tu tierra
añorando el hogar al que perteneces
en donde habita el amor,
los sueños tallados de a dos,
la ilusión que crea la vida
y mece la esperanza cada día.
Soberano de mi alma,
señor de mis confines,
caudillo de mi oquedad,
te espero despierta
para que bebas mis heridas
y hagas nacer una nueva piel
que te corteje.
Solsticio- de verano o invierno,
a quién le importa el hemisferio
cuando de sentir se trata-
llegas a tiempo,
los latidos te anuncian,
la libertad te pregona.
Dejas atrás el infortunio,
la condena, el hechizo maldito.
Tus pasos desandan el camino
y yo bautizo tu olor con mi saliva.
Alimentas mi fe, calmas mis ansias.
Estás aquí, levantando un imperio eterno
nuestros hijos y los hijos de nuestros hijos
celebrarán junto a la hoguera.
Argos te reconoce y yo te espero,
sin desesperanza.
Tu odisea ha terminado.


junio 24, 2011

Refracción

Enamorada.
Envuelta en ti, arremolinada,
arpegio de sonrisas para inaugurar
un cielo encendido de sol
que nos visita con el cosquilleo apropiado
para despertarnos.
Un espejo donde haces una pregunta
que se actualiza todos los días
mientras cada respuesta
es posta de la siguiente.

             ¿Qué te hace feliz?:

©             La  mirada azulceleste
donde cabalgan mis ojos
apasionados.
©             Las pinceladas
que no se cansan de descifrar
el amor hecho palabras danzantes
para tu boca  y la mía.
©             La ilusión  vestida de estreno
en esta forma tan tuya de honrar
la alegría compartida.
©             La fuerza dormida
que descubrimos en nuestro interior
desde que estamos juntos.
©             Tu andar cantarino,
y la ofrenda cotidiana de tus besos.
©             La piel que ahora es una
aunque se despliegue en dos cuerpos.

Me hace feliz lo que hemos elegido,
Pajarito, aquello por lo que  hemos esperado
media vida.

junio 19, 2011

Papá

Al padre que no tuve, al que necesitaba,
al que esperé durante toda mi infancia,
y aún en la adolescencia (también después).
Al que me enseñó a creer en el amor
y a sentir que no había nada que fuese imposible de lograr.
Con el que no aprendimos a curar heridas porque no se producían.
A quién nos hablaba de sus cicatrices, con orgullo
y a sabiendas de lo importante que era saberse guerrero imbatible
aun aceptando las propias derrotas.
Al que nos animaba, con sus bromas, con sus payasadas,
con su alma de arlequín y saltimbanqui.
Al que le leía historias que me había enseñado a leer,
con el que pasaba las tardes más bonitas en el campo
a crina limpia mientras montaba a Furia,
mi yegua negro azabache.
Al que admiraba por su modo de ser, por su grandeza,
por su perfil bajo, por su coherencia, por su generosidad,
por sus acciones que comulgaban en honestidad y firmeza.
Por la alegría cotidiana que contagiaba,
por su sencillez y su modo de hacer que aprender fuese una aventura.
A ese papá que llevaba nuestras fotos en su agenda,
que hacía planes para todos y nos sorprendía sin que hiciese falta que hubiera nada especial para celebrar porque estar juntos ya era una celebración.
Al papá que soñaba, al que nos acompañaba al cole,
Al que nos miraba con satisfacción e ilusión siempre vestidas de estreno.
Al que amaba a mamá y junto ella era el hombre más feliz del mundo.
A ese papá que debe haber quedado en algún tintero
o está esperando su turno para hacer su entrada triunfal.
Al papá que  habita el mundo de la fantasía
y al que puedo buscar cada vez que necesito.
¡Feliz día papá!

Lectura

Bajo la sombra del palo borracho,
sobre la hierba, tendidos.
Él acaricia su cabello sin darse cuenta.
Ella lo disfruta sin disimular su dicha,
sabiendo que no hay mejor sitio para su cabeza
que las piernas del amado.
Suena Clarice, se cuela entre mate y mate,
mientras las páginas se hacen palabras
 y las palabras, lectura compartida.
Ambos sonríen, se miran, se atrapan en un beso
y suspiran pedacitos del alma.
Podría ser domingo, o lunes o jueves,
no hay siesta que requiera ningún calendario.
Los amantes viajan en la alfombra que teje la historia.
la lámpara brilla en un costado,
ya no es necesaria: ha cumplido todos los deseos.

junio 16, 2011

Inquietud

¿Qué haría sin ti, sin tus ojos, sin tus palabras,
sin eso que hace que cada día sea diferente
desde que estás en mi vida?
¿Qué haría sin ti, sin tu presencia,
sin tu alegría,
sin los planes compartidos,
sin la esperanza de que sea posible
 alcanzar lo que soñamos?
¿Qué haría sin ti, sin tu mirada,
sin tu  sonrisa , sin tu andar
que es como el mío desde que hallamos el sendero?
¿Qué haría sin ti, pajarito, que haces que la dicha
logre mecerse en nuestras manos?
¿Qué haría sin ti, amor, sin la ilusión siendo estrenada
en este instante?

junio 12, 2011

Palabra empeñada

La cosa es bien simple:
no se trata de mí, sino de ustedes,
no puedo pagar penas ajenas,
nada quiero saber de vuestra historia.

Entiende, no soy yo, he pasado
cuando las llamas se habían extinguido,
sólo vi cenizas y vestigios
de un tiempo transitado.

Quise seguir de largo y no he podido.

Te observo cada día: en ti anida el desconcierto,
la angustia, la tristeza;
tu mundo está siendo otro
que no quisieras haber imaginado.

Sé digna, sé mujer, sé fortaleza.

Toma el sendero,
y el amor te mostrará su real morada.
Ten paciencia, ten fe, hay esperanza.
Los niños te custodian y te aman
(no hay ángeles capaz de superarles).

Llora todas las lágrimas,
grita si quieres,
despierta estás,
no hay pesadillas,
no inventes nada,
reclámale a la vida
y ponle condiciones
(aunque también debes recordarlas).

Vuelve al baúl, abre el cerrojo,
revuelve hasta que encuentres
la lista de los sueños,
los deseos pendientes,
las armas que necesitas
para ganar esta batalla:
la única contienda es contigo misma.
Te debes una tregua,
te debes una hazaña,
deja ya de esconderte en los rincones,
no busques más culpables,
ni condescendientes cómplices,
que no hagan de ti una mártir,
no lo permitas,
ya nadie quiere ser canonizada
ni rendirle pleitesía a quién se victimiza.

Deja la mirada escrutadora,
no busques pruebas,
¿qué ganarás declarándole culpable?
Acabarías siendo condenada por el mismo crimen.
No más sentencias,
no más ataques,
no más miseria,
no más derrapes.

Sé generosa contigo,
ve hasta el espejo,
busca a la niña que espera su turno en un costado
rescata su mirada iluminada,
proponle no jugar a la escondida,
hazle una invitación,
ve de paseo,
muéstrale el jardín,
abre la puerta,
hay algo más cruzando algunas calles,
no es verdad que cada uno hace lo que puede,
lo que mejor le sale, lo que ha aprendido,
no es verdad
porque siempre puedes marcar la diferencia,
sentirte una campeona y contagiar tus logros.

Hallarás a alguien que te quiera bien todos los días,
que te haga bien, que te elija,
que atraviese el mundo solo para amarte.
Que fluya por tus labios,
Que sienta por tus ojos,
Que beba por tu piel,
Que suspire sonidos en tu alma
Que acaricie los pliegues de tu ser.

Basta ya, hermana, de pagar penas ajenas.
Basta ya de soportar cruces nefastas.
No quiero más dolor que el que me toca,
no elijas más dolor del que has vivido.

Déjale ir, liberarás al hombre
y sin embargo siempre tendrás contigo al padre.

No son sólo palabras:
recibes de mí una promesa.



Instante

En un instante soy capaz de ser quién soy,
de salir a cara descubierta,
de caminar descalza por la hierba, la arena,
las piedras calientes o la humedad atrapante del barro
con que estamos hechos,
y atravesar el mundo para encontrarte,
aunque haga falta derribar murallas,
o camuflarse en medio de la contienda,
o  inventar nuevos mundos posibles
donde seamos capaces de amarnos sin descanso,
con prisa, sin tregua.
Al instante siguiente algo desbarata mi paz,
 pierdo coordenadas,  me quedo sin señal,
 no encuentro el norte, nada parece territorio conocido,
y me veo sentada en medio del charco con el cántaro
convertido en mil pedazos arrojados por todas partes.
Un nuevo instante con sonrisa dibujada,
latidos escapando del pecho con ecos garabateados
que llegan, en el amanecer, al corazón de destino,
donde anidan, buscan cobijo, abrazos y buen amor.
En ese instante logro verme desnuda sin más piel que la tuya
desandando estas miradas con estos ojos que nos consagran.





junio 10, 2011

Embeleso

Aquí vivimos, en este mundo recién nacido,
que estamos acunando y conociendo.
En el octavo día, extasiados en la dicha
de la primera mirada, sin decir más palabras,
que las que han sido dichas.
Volcán es la boca, lava entre los labios,
erupción inminente sin que haya otra Pompeya.
Simiente a punto de despertar, el surco presto,
humedad propicia y savia anunciada soñando ser.
Apenas todo para que  la nada se vista de preludio.
Te amo desde el primer instante.
Tambores autoejecutados -en clave de sol-
siguen la partitura de los besos.
Felices, en este mundo en el que fijamos residencia.
La vida cotidiana nos da la bienvenida
(nosotros sabemos de la eternidad de la existencia).

junio 06, 2011

Nueva jornada

Despierto, tú a mi lado.
Ronroneo y te deslizas aún más cerca.
Te acaricio, respondes y no paras.
Te provoco, sonríes y arremetes:
lluvia de besos al amanecer
acompaña el canto de los pájaros.
Me miras, no te veo, pero me miras.
Algo dices, apenas susurro, apenas suspiro.
Algo digo, apenas susurro, suspiro, gemido.
Nos entendemos:
así el día cuaja desde el principio.
Fractal amor.
El desayuno.

Autopsia

                                                                              Sentimos angustia para sentir alivio. Proverbio japonés

No es pena, no.
No es angustia, no.
No es tristeza, no.
No es dolor, no.
No es nostalgia, no.
No es pesimismo, no.
No es rencor, no.
No es agonía, no.
No es desgarro, no.
¿Qué es?
Tal vez, desilusión, sí.
O sueños rotos, sí.
O palabra vaciada de significado,
y  promesas incumplidas, sí.
O una espera sinsentido, sí.
O un proyecto trunco, sí.
O las ganas huérfanas, sí.
O los besos no dados, sí.
O las caricias muertas, sí.
O la mirada que no halló mirada, sí.
O el deseo apagado, sí.
O la vida sin rumbo, la encrucijada,
el laberinto, el camino sin mapa,
el tesoro inexistente, sí.
Yo misma en medio de la nada.
Sí.

junio 03, 2011

Pureza

Oquedad y génesis.
Ojos azules
Ojos pardos
Alquimia de la transparencia.
Maceración de la paciencia.
Anunciación de la dicha.
Sublimación del dolor
Atizamiento del deseo
Derroche de sueños
Cultivo de planes
Relampagueo de ideas
Reguero de palabras
                               y promesas.
Espera consentida.
Tu angustia es la mía cuando no te veo.
Vaciar la cueva para preparar el lecho.
La humedad de tu boca se hace una con mi boca.
En el puzzle de las palabras, las letras son huérfanas y las ilusiones, alas...