Golpe de Gracia

No mueres cuando quieres, no eliges el momento,
no puedes anticiparte, no hay modo.
Mueres cuando ha llegado el momento,
cuando el golpe de gracia es certero.
Cuando el desgarro se hace palabra y te flagela.
Cuando su mirada te desprecia y su mano
sostiene el acero que te atraviesa sin piedad.
No mueres cuando quieres, mueres cuando eres más que amor,
cuando te das sin reservas, cuando todo en ti es amar,
cuando no mides riesgos,
cuando no respetes murallas,
cuando te bates a duele con las huestes del infierno solo para protegerle mientras te mata.
No mueres cuando quieres, mueres en 14 de febrero, mientras San Valentín te hace un guiño cómplice y te enlista: eres bueno como súbdito, puedes servirle,
tu experiencia te respalda: conoces el amor y has muerto por ello sin darte cuenta.