Desterrar la obediencia,
desbaratar las alianzas,
arrancar las máscaras y
arrojarlas muy lejos.
Ante lo evidente,
total desconfianza.
Frente a lo ordinario,
presurosa huida.
Más allá de los principios
y más acá de las disonancias:
porque solo hay un modo de saber reconocer
lo que tiene encantadora autenticidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario