Creo en la siembra
en el sagrado ritual,
en escoger las semillas,
en abrir el surco,
en amasar la tierra
y cavar la hendidura
que será cuenco, cuna, matriz.
Creo en el agua mansa
que activa el conjuro
que despierta la vida
adormecida.
Creo en la luz del sol
y en la mirada
que nace en los ojos
que me sonríen cada mañana.
Creo en este amor,
en esta profesión maravillosa,
que me hace ser maestra
para seguir aprendiendo
junto a ellos.
Creo en las pioneras,
creo en el camino,
creo en cada huella,
y en todos estos niños.
Creo, siempre,
en la capacidad creadora
que nos habita.
en el sagrado ritual,
en escoger las semillas,
en abrir el surco,
en amasar la tierra
y cavar la hendidura
que será cuenco, cuna, matriz.
Creo en el agua mansa
que activa el conjuro
que despierta la vida
adormecida.
Creo en la luz del sol
y en la mirada
que nace en los ojos
que me sonríen cada mañana.
Creo en este amor,
en esta profesión maravillosa,
que me hace ser maestra
para seguir aprendiendo
junto a ellos.
Creo en las pioneras,
creo en el camino,
creo en cada huella,
y en todos estos niños.
Creo, siempre,
en la capacidad creadora
que nos habita.