Que sea invierno, para volver a acurrucarnos en la cama
sin que el frío pueda colarse entre las mantas.
Un árbol de infancia, el algarrobo, puede ser,
sí, el de la hamaca en la casa de la abuela,
ese mismo, y allí, debajo, sentados, mientras te leo.
Placer hecho helado que se deshace en la boca,
la tuya o la mía, no importa, porque hace mucho calor
y sobran excusas.
Un día de playa, mar infinito, haciendo de intermediario
para los besos y las miradas.
Pantalla gigante: el cine,
donde refugiarnos
una siesta cualquiera.
El agua lista y la yerba,
y el mate haciendo de las suyas
mientras llueve a cántaros.
Canción de amor para que las volteretas
sean más divertidas.
La mesa lista,
y la cena, y los dedos entrelazados,
antes del postre.
Amarte siempre,
como cada día.
Amarte siempre,
sin precedentes.
Amarte siempre,
con poesía.
sin que el frío pueda colarse entre las mantas.
Un árbol de infancia, el algarrobo, puede ser,
sí, el de la hamaca en la casa de la abuela,
ese mismo, y allí, debajo, sentados, mientras te leo.
Placer hecho helado que se deshace en la boca,
la tuya o la mía, no importa, porque hace mucho calor
y sobran excusas.
Un día de playa, mar infinito, haciendo de intermediario
para los besos y las miradas.
Pantalla gigante: el cine,
donde refugiarnos
una siesta cualquiera.
El agua lista y la yerba,
y el mate haciendo de las suyas
mientras llueve a cántaros.
Canción de amor para que las volteretas
sean más divertidas.
La mesa lista,
y la cena, y los dedos entrelazados,
antes del postre.
Amarte siempre,
como cada día.
Amarte siempre,
sin precedentes.
Amarte siempre,
con poesía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario